EX MINISTRO DE JUSTICIA VÍCTOR GARCÍA TOMA CALIFICA DE EMBLEMÁTICA SENTENCIA DEL TC SOBRE IMPRESCRIPTIBILIDAD DE DELITOS DE LESA HUMANIDAD

El ex ministro de Justicia, Víctor García Toma calificó de emblemática la sentencia del Tribunal Constitucional que declara imprescriptibles los delitos de lesa humanidad, porque resuelve un problema de interpretación de los jueces. Estas precisiones las dio durante la entrevista que concedió al programa "Tus Derechos".

"Estamos hablando de una sentencia del Tribunal Constitucional redactada de una forma didáctica, muy clara y precisa, sobre todo en la configuración del tipo de delito y estoy seguro ayudará a los jueces a utilizarlo de manera eficaz en los procesos que les corresponda seguir", remarcó.

García Toma manifestó que es un fallo valiente y coloca al Tribunal Constitucional en un papel de vanguardia de respeto de los derechos humanos, considerado el eje central de un Estado. Dijo que luego de la sentencia existió una discusión académica, pero finalmente quedó claro que es una jurisprudencia vinculante y por lo tanto tiene efectos generales que los jueces deben aplicar.

Agregó que estas barbaridades que también ocurren en América Latina, de ver como el ser humano se despoja de su ser mismo y actúa en forma tan vil y cruel asesinando o torturando a personas, deben ser investigadas y sancionadas por la justicia, sin importar el año en que ocurrieron.

García Toma sostuvo que la sentencia permitirá que los familiares de las víctimas que sufrieron violaciones de los derechos humanos, tienen todo el derecho a saber la verdad y conocer quiénes son los responsables, porque el objetivo final es que no exista impunidad cuando se trata de estos delitos.

Recordó que el Decreto Legislativo Nº 1097 fue polémico desde su creación y generó un arduo debate al interior del Consejo de Ministros, donde el sector Defensa incluyó en el artículo primero de las disposiciones complementarias finales que los crímenes de lesa humanidad rigen para el Perú a partir del 9 de noviembre de 2003.

Lima, 3 de mayo de 2011